En una hazaña extraordinaria dentro del mundo de los videojuegos, se ha destacado la gesta de un jugador pacifista que ha logrado alcanzar el nivel 500 en el popular juego Call of Duty sin realizar ninguna baja a lo largo de su trayectoria. Este singular logro ha sorprendido a la comunidad gamer, demostrando que la estrategia y habilidad pueden prevalecer sobre la violencia en este tipo de juegos de disparos. Este jugador ha demostrado que es posible triunfar en la mayoría de sus partidas sin recurrir a la agresión, desafiando así los convencionalismos del género. Sin duda, este hito marca un antes y un después en la forma de entender y disfrutar de los videojuegos de acción.
Jugador pacifista de Call of Duty alcanza nivel máximo sin realizar ninguna baja
Se supone que está jugando un shooter, pero no le ha disparado ni una sola vez a sus enemigos. Un miembro de la comunidad de Call of Duty se impuso a sí mismo el desafío de llegar al nivel máximo del videojuego sin matar a nadie. Una ruta pacifista en Modern Warfare 3 que todavía está en progreso, pero que ha querido compartir con la comunidad tras alcanzar el nivel 500. Puede que el emblemático sistema de prestigio haya sufrido grandes cambios con el paso del tiempo, pero ya van más de 75 horas dedicadas a esta tarea que, claro, se han traducido en cero bajas enemigas.
La historia de un usuario de Call of Duty que triunfa sin matar enemigos
La historia ha sido compartida por un usuario conocido como Pilgore a través de los foros de la comunidad y hay muchas cosas que llaman la atención. El jugador ha convertido las rutas pacifistas en su forma de jugar desde el lanzamiento de Black Ops Cold War. Así, ha tenido tiempo para refinar su estrategia, que se basa en tomar los objetivos y derribar las rachas de bajas enemigas.
Lo más sorprendente del recorrido de Pilgore, sin embargo, es que gana casi todas sus partidas. En Call of Duty: Modern Warfare 3 ha logrado una tasa de victorias de 3,91 después de las mencionadas 75 horas de juego. En un juego tan popular como Call of Duty, que en un mal año es capaz de vender cerca de 30 millones de copias, es normal que haya unos cuantos usuarios que decidan jugar de forma alternativa.
En un juego tan popular como Call of Duty, que en un mal año es capaz de vender cerca de 30 millones de copias, es normal que haya unos cuantos usuarios que decidan jugar de forma alternativa. Pese a ello, este es un reto tremendamente extraño y más si tenemos en cuenta que el jugador lo lleva a cabo con cada nueva entrega. Hay gente que simplemente se divierte de forma diferente y ese no deja de ser otro aspecto positivo de los videojuegos.
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