Riot Games ha generado controversia al despedir a una empleada, para luego permitir su regreso a trabajar en League of Legends esa misma tarde. Este inusual suceso ha sido revelado por una artista del popular juego, quien ha decidido compartir la dura realidad de los despidos en la industria de los videojuegos. Este incidente pone de manifiesto las complejidades y retos que enfrentan los trabajadores en un sector tan competitivo como el de los videojuegos, donde la inestabilidad laboral y la presión por rendir al máximo son moneda corriente. La historia de esta empleada de Riot Games pone sobre la mesa la importancia de reflexionar sobre las condiciones laborales en la industria y la necesidad de proteger los derechos de los trabajadores.
Empleada de Riot Games es despedida y vuelve a trabajar en LoL el mismo día
Riot Games ha sido objeto de críticas después de que una trabajadora afectada por los despidos masivos que llevó a cabo la compañía a comienzos de este año revelase cuál era su situación laboral. Rachel Tart Cross, artista independiente, fue despedida por la compañía mientras trabajaba en el departamento de skins de League of Legends, solo para ser contactada por una empresa externa pocas horas después para seguir creando skins para el mismo juego a cambio de una cuota fija.
Revelan la dura realidad de los despidos en la industria de videojuegos
Esta publicación viral en redes sociales descubre una realidad dolorosa de los recientes despidos en la industria del videojuego. Rachel Cross, reconocida por sus trabajos en proyectos como Heartsteel y Luchadores de Almas, fue víctima de un proceso de recorte de costes en Riot Games. La práctica de subcontratar a artistas externos para proyectos puntuales en lugar de mantener empleados fijos ha despertado críticas hacia la compañía.
Críticas a Riot Games por situación laboral de artista afectada
Rachel Tart Cross ha expresado su preocupación por esta situación, destacando que el arte no siempre es valorado por las empresas de la misma manera que por la sociedad. A pesar de no querer afectar sus futuras oportunidades laborales, Rachel ha decidido hacer pública su experiencia para concienciar a los consumidores sobre las prácticas poco éticas en la industria de los videojuegos. La comunidad y figuras clave han sido críticas con la gestión de Riot Games, aunque la compañía no se ha pronunciado al respecto.
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