En un anuncio que ha generado gran expectación en la comunidad de usuarios de inteligencia artificial, ChatGPT, la plataforma de lenguaje más avanzada del momento, anuncia que está revisando y revaluando sus políticas de contenido. Entre las posibles modificaciones, se encuentra la creación de contenido erótico, un tema que ha generado un intenso debate en torno a la libertad de expresión y los límites éticos en la creación de contenido en línea. ¿Será posible que en un futuro cercano, los usuarios de ChatGPT puedan crear contenido erótico de manera segura y responsable? En las próximas líneas, analizaremos las implicaciones de este posible cambio y exploraremos las consecuencias éticas y legales que conlleva.
La frontera del contenido: OpenAI analiza cambios en políticas de contenido y posible creación de contenido erótico
Después de la presentación de GPT-4, el siguiente paso de ChatGPT para acercar la inteligencia artificial a las capacidades humanas, OpenAI se encuentra en el centro de atención. Sin embargo, antes de esta presentación, la compañía habló públicamente sobre una posible renovación en sus políticas que puede dar lugar a situaciones peligrosas.
Según TechSpot, OpenAI estudia la posibilidad de permitir a los usuarios crear pornografía con inteligencia artificial. En la actualidad, las empresas de IA están sujetas a filtros para evitar que se cree este tipo de contenido. No obstante, la firma norteamericana se está planteando llevar a cabo una revisión en sus términos y, con ella, brindar a los usuarios la capacidad de crear contenido erótico de manera responsable con herramientas que utilicen la inteligencia artificial generativa.
La preocupación por los deepfakes
Sin embargo, esta posibilidad da pie a la expansión de un problema que ya ha afectado a celebridades de la talla de Taylor Swift: los deepfakes no autorizados. Con las herramientas basadas en inteligencia artificial, multitud de usuarios crearon contenido pornográfico de la artista y este se propagó por las redes sociales sin control.
Por ello, Joanne Jang, actual líder del modelo de OpenAI, señaló que tendrán mucho cuidado con esta decisión, ya que no quieren que las personas violen los derechos de otras personas. Así, Jang se refirió a la posibilidad de retirar sus filtros y abordó qué tipo de contenido se podría crear: “depende de tu definición de pornografía”.
No obstante, se mostró tajante con los deepfakes, ya que aseguró que bajo ningún concepto darán la posibilidad de crear este tipo de contenido. Sea como fuere, la existencia de esta opción provoca un temor generalizado, ya que retirar estos filtros y ofrecer una IA con tanta libertad va en contra de producir un modelo de lenguaje seguro y beneficioso.
Es importante destacar que la inteligencia artificial puede ser una herramienta poderosa, pero también puede ser utilizada de manera irresponsable. Es fundamental que las empresas de IA tomen medidas para evitar el abuso de sus tecnologías y protejan los derechos de las personas.
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