Japón ha encontrado el santo grial de las baterías, una isla remota de Tokio con más de 200 millones de toneladas de metales raros
En un hallazgo que puede revolucionar la industria de las baterías, Japón ha descubierto una isla remota ubicada cerca de Tokio que alberga una ingente cantidad de metales raros, esenciales para la fabricación de componentes electrónicos. Según los expertos, esta isla contiene más de 200 millones de toneladas de estos valiosos recursos, lo que la convertiría en el depósito más grande del mundo. Esta noticia tiene un gran potencial para impulsar la producción de baterías sostenibles y vehículos eléctricos, y sentar un precedente para el desarrollo de tecnologías más eficientes y respetuosas con el medio ambiente.
Descubrimiento Revolucionario: Japón Encuentra Depósitos de Minerales cerca de Minamitorishima
Un grupo de investigadores de la Universidad de Tokio ha anunciado un hallazgo histórico en la isla remota de Minamitorishima, que promete convertirse en la fuente de 2.500 toneladas de recursos minerales diarios de níquel y cobalto, esenciales para la creación de baterías de iones de litio.
Un Tesoro Submarino
En colaboración con la Fundación Nippon, los investigadores han descubierto un área de alrededor de 100 kilómetros cuadrados en el fondo oceánico de la isla, a unos 5.000 metros de profundidad, con 234 toneladas métricas de metales raros en forma de nódulos de manganeso.
Este descubrimiento es lo suficientemente importante como para revolucionar la industria tecnológica de Japón y su economía. Según los expertos, la cantidad de níquel encontrada es suficiente para cubrir el consumo de todo Japón durante 75 años, mientras que la cantidad de cobalto encontrada puede servir como recurso durante unos 11 años.
La Importancia de la Extracción
Los investigadores afirman que es necesario extraerlos lo antes posible para ponerlos a disposición de la industria y que es sumamente importante dar forma a una nueva industria oceánica que permita alcanzar nuevas innovaciones.
Aunque el descubrimiento se realizó en 2016, no ha sido hasta ahora que han podido calcular el tesoro submarino que tienen entre manos. Ahora planean dar forma a un proyecto de extracción experimental que debería terminar de extraer todos esos materiales raros para finales de marzo de 2026.
Un Futuro Prometedor
Este descubrimiento abre las puertas a un futuro prometedor para la industria tecnológica de Japón, permitiendo el desarrollo de nuevas tecnologías y innovaciones que impulsarán el crecimiento económico del país.
La extracción de estos minerales raros permitirá la creación de baterías de iones de litio más eficientes y sostenibles, lo que tendrá un impacto significativo en la industria tecnológica y en la lucha contra el cambio climático.
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