La Importancia de Actualizar los Drivers de una Tarjeta Gráfica NVIDIA
Uno de los aspectos más importantes que debemos tener presentes al contar con un PC Gaming es el mantener los drivers del dispositivo correctamente actualizados. Aunque puede parecer algo de poca importancia, lo cierto es que muchos de los problemas de rendimiento que apreciamos en algunos títulos son consecuencia de no contar con la última versión de los drivers de nuestros componentes.
Esto es algo muy habitual respecto a las tarjetas gráficas, ya que las compañías van lanzando nuevas versiones de sus drivers cada pocas semanas, lo que acaba provocando que haya ocasiones en las que no contemos con la última versión instalado en nuestro dispositivo. Especialmente con este componente, esto puede suponer una pérdida de rendimiento crucial, hasta el punto de que un determinado título pueda ser completamente injugable.
Cómo Actualizar los Drivers de una Tarjeta Gráfica NVIDIA
Lo primero que debemos tener presente antes de actualizar los drivers, es observar si contamos con una versión previa de estos instalada en nuestro ordenador. En el caso de las tarjetas gráficas de NVIDIA es algo realmente sencillo de comprobar, ya que tan solo tendremos que ver si contamos con GeForce Experience instalado.
Para ello, tan solo habrá que buscar en la esquina derecha de la barra de tareas, y ver si el logo de NVIDIA está presente en el mismo. Una vez comprobado, hay dos formas de descargar los drivers.
Descargar los drivers a través de GeForce Experience
Sí, efectivamente, contamos con la herramienta de NVIDIA instalada, la manera más rápida y sencilla de actualizar nuestros drivers es a través de GeForce Experience. Para ello, deberemos iniciar la aplicación, y una vez hecho, nos aparecerá ante nosotros la portada de los juegos que tengamos instalado en nuestro PC Gaming.
En esta pestaña, tendremos la posibilidad de modificar los ajustes óptimos de cada juego en base a nuestro hardware, pero eso es algo de lo que os hablaremos otro día.
Si lo que queremos es instalar los últimos drivers de nuestra tarjeta gráfica de NVIDIA, lo que tendremos que hacer es pinchar en la pestaña de controladores. Una vez en ella, es posible que nos encontremos ante dos situaciones. Por un lado, que contemos con la última versión instalada, y por tanto, no podamos actualizar nada. Por otro, que aparezca disponible un nuevo controlador GeForce Game Ready.
En este segundo caso, la instalación de los drivers es realmente sencilla. Tan solo hay que pulsar en Instalación rápida, y pulsar en siguiente a cada mensaje que nos aparezca. Finalmente, una vez instalados, será necesario que reiniciemos nuestro PC.
Descargar los drivers a través de la página web de NVIDIA
La otra manera de instalar los drivers de nuestra tarjeta gráfica NVIDIA es acudiendo directamente a la web de la compañía. Una vez en la página, tan solo tendremos que buscar nuestra tarjeta gráfica entre las diferentes opciones.
¿No sabes qué tarjeta gráfica tienes? Nosotros te explicamos como descubrirlo aquí.
Tras saber cuál es la tarjeta gráfica que monta nuestro PC, habrá que rellenar los datos, con el modelo de la tarjeta, el sistema operativo para el que queremos los drivers, y el tipo de descarga. Sobre esto último, habrá que escoger Controlador Game Ready (GRD), ya que es el que está pensado para ser instalado automáticamente.
Pulsamos en búsqueda y a continuación nos saldrá la opción de descargar el último driver que NVIDIA haya lanzado para nuestra tarjeta.
¿Debería tener instalados los últimos drivers oficiales?
La respuesta rápida es sí. Como ya he comentado, contar con la última versión de los drivers de nuestra tarjeta gráfica puede suponer la diferencia entre que el rendimiento de juegos como Starfield o Red Dead Redemption 2 funcionen correctamente en nuestro dispositivo.
Sin embargo, hay excepciones, y es cierto que hay ocasiones en las que algún que otro driver presenta ciertos problemas. Como digo, no es lo habitual, pero es posible que haya alguna versión que cree incompatibilidades con algunos juegos, o que puedan afectar negativamente al rendimiento del dispositivo.
No obstante, son casos muy aislados, por lo que la recomendación es que siempre mantengáis vuestra tarjeta gráfica con la versión más actual posible.
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