En el apasionante mundo de Zelda: Breath of the Wild, la búsqueda de secretos y tesoros ocultos es una de las actividades más emocionantes para los jugadores. En esta ocasión, nos adentramos en el misterioso Santuario de Kibaza, un desafío que pondrá a prueba nuestra destreza y habilidad. Descubrir los secretos de este santuario requerirá no solo valentía, sino también astucia y paciencia. En este artículo, te guiaremos paso a paso a través de las complejas pruebas que aguardan en su interior, revelando estrategias y trucos para superar los obstáculos y obtener los tesoros que yacen en su corazón. ¡Prepárate para una emocionante aventura llena de desafíos y recompensas en el Santuario de Kibaza!
Descubre cómo resolver el Santuario de Kibaza en Zelda: Breath of the Wild
Nuevamente, los poderes de Link no van a ser siempre un requisito para resolver algunos de los Santuarios de Zelda: Breath of the Wild. A veces simplemente hace falta activar algunos mecanismos en un orden concreto para salir airosos de ellos. Este es el caso del Santuario de Kibaza, del cual os traemos su solución y tesoro en esta guía para el título de Nintendo.
Guía paso a paso para obtener el tesoro oculto del Santuario de Kibaza
Ubicación del Santuario de Kibaza
El santuario de Kibaza está oculto en un cañón que hay cerca de la frontera entre la región de la Llanura de Hyrule y la de las Colinas. Es fácil encontrarlo incluso sin el mapa de la zona revelado o el sensor Sheikah, ya que está en el costado derecho del camino si lo estamos siguiendo para recorrer esa zona de Hyrule.
Solución al Santuario de Kibaza
El Santuario de Kibaza es uno que se resuelve de forma secuencial por el uso de las esferas a las que hace referencia el nombre de su prueba: Tras las dos esferas. Nada más entrar vemos que hay una losa de resorte activable mediante un mecanismo que, si lo activamos, nos impulsa hacia arriba pero no lo suficiente como para alcanzar planeando el bordillo que lleva a la zona superior donde está el altar con el símbolo de valía.
Lo que hay que hacer es dirigirse al costado derecho de la estancia en la que estamos, y disparar unas flechas a la esfera anaranjada que hay sobre un pilar cuadrado. Si fallamos y no conseguimos que se meta en el zócalo que hay en la plataforma donde están los pilares no pasa nada ya que se generará una nueva; o si conseguimos empujarla para que caiga sobre el suelo de la estancia, mejor, ya que sólo hemos de agarrarla y lanzarla.
Al encajarla en el zócalo, unas verjas que había después del mecanismo se abren y revelarán otra esfera. Hemos de agarrarla e ir con ella hasta situarnos sobre la losa de presión que hay al otro extremo de la estancia. Abrirá las rejas que hay en frente revelando otro zócalo. El truco está en lanzar la esfera para encajarla en él.
Hacerlo, hará que la estructura sobre la que está el bordillo comience a moverse hacia adelante y luego vuelva a su posición, repitiendo el movimiento cada pocos segundos.
Ya sólo queda ponernos sobre la losa resorte que activaremos con un golpe de nuestra arma al mecanismo en el momento en que la estructura avance hacia nosotros, para planear y situarnos sobre ella. A partir de aquí, tomamos cualquiera de las dos plataformas que ascienden hasta el altar con el guardián Sheikah y recogemos el símbolo de valía de este santuario.
Tesoro del Santuario de Kibaza
El único tesoro de este santuario está algo oculto en uno de los extremos del Santuario, sobre una de las columnas decorativas. Lo veremos si subimos por la rampa que queda a la izquierda de la estructura que se mueve, y es fácil de alcanzar si nos lanzamos en paravela desde el nivel superior.
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