Bill Gates ha confirmado que el impacto de la IA en el cambio climático no será el que habíamos previsto
En un reciente encuentro sobre tecnología y sostenibilidad, Bill Gates, cofundador de Microsoft y destacado filántropo, ha hecho una reveladora declaración que está generando gran interés en la comunidad científica y medioambiental. Según Gates, el impacto de la Inteligencia Artificial (IA) en el cambio climático no será tan devastador como se había previsto. Esta afirmación puede parecer contraria a la creencia generalizada de que la IA y la tecnología en general son una de las principales causas del aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero y la degradación del medio ambiente. Sin embargo, Gates argumenta que la IA puede tener un papel clave en la lucha contra el cambio climático, siempre y cuando se utilice de manera responsable y sostenible.
Bill Gates revoluciona la percepción sobre el impacto de la IA en el cambio climático
Desde el nacimiento del boom de la inteligencia artificial, uno de los principales discursos frente a la tecnología ha sido que su impacto en el cambio climático era lo bastante preocupante para que seguir por ese camino no mereciera la pena. Sin embargo, Bill Gates, fundador de Microsoft y filántropo, ha desmontado el miedo a que la IA acelere el gasto energético con solo tres cifras.
En la Breakthrough Energy Summit de Londres, Bill Gates habló sobre los objetivos contra el cambio climático y cómo la tecnología puede ayudarnos a alcanzar las metas que los gobiernos se han autoimpuesto. Al ser preguntado por cómo la IA está afectando a esos objetivos, Bill Gates tomó una perspectiva mucho más esperanzadora.
La IA y el cambio climático según Bill Gates
En una entrevista con periodistas, Bill Gates confirmó que la inteligencia artificial ofrecerá más beneficios que problemas para alcanzar los objetivos climáticos. A pesar de las crecientes preocupaciones frente al aumento del consumo energético en los centros de datos, Gates cree que ese gasto terminará compensándose.
«Los centros de datos, en el caso más extremo, representan un aumento del 6%, pero probablemente solo está entre un 2% y un 2,5%. La pregunta es: ¿Acelerará la IA una reducción superior al 6%? Y la respuesta es: sin duda alguna», aseguró Gates.
Según su discurso, la IA permitirá a los países utilizar menos energía valiéndose de tecnologías que consigan hacer las redes eléctricas más eficientes. Así, incluso aunque la IA alcance un punto en el que duplique sus emisiones de carbono actuales, algo que se estima de cara a 2030, Gates asegura que esa demanda adicional será compensada por nuevas inversiones en energías renovables.
Bajo su punto de vista, el verdadero problema no está en las grandes tecnológicas, que de una forma u otra están comprando energía limpia a un precio más caro por el mero hecho de colocarse esa medalla, sino en cómo los gobiernos están realizando una transición más lenta de lo planeado, lo que según sus cálculos retrasará en 15 años las metas que se habían marcado.
Fuente: Lukasz Kobus
La IA no es el enemigo
Bill Gates destaca que la IA es una herramienta que puede ayudarnos a luchar contra el cambio climático, y que no debemos temerla sino utilizarla de manera responsable. «Ser razonables frente a la demanda de energía de la inteligencia artificial» es la clave para aprovechar sus beneficios.
Deja una respuesta