La noticia Estados Unidos reparte miles de millones de dólares incluso a sus rivales. La Ley CHIPS ya beneficia a Intel, Samsung y TSMC revela un giro significativo en la política económica del país norteamericano. A través de la Ley CHIPS, se está destinando una inversión millonaria a empresas clave en la industria de semiconductores, incluso aquellas consideradas rivales. Este cambio estratégico busca fortalecer la competitividad de la economía estadounidense y reducir su dependencia de proveedores extranjeros. La decisión de apoyar a empresas como Intel, Samsung y TSMC evidencia una nueva visión de colaboración y desarrollo tecnológico en un mercado global altamente competitivo.
Estados Unidos destina miles de millones de dólares a gigantes tecnológicos con la Ley CHIPS
Desde hace un año y medio, Estados Unidos está buscando impulsar la industria local de chips a través de una legislación multimillonaria. En agosto de 2022, el gobierno del país norteamericano aprobó la Ley CHIPS, una normativa que, en resumidas cuentas, busca impulsar la fabricación de semiconductores en Estados Unidos a través de inyecciones multimillonarias a distintas compañías.
Tras un año y medio de negociaciones, ya estamos empezando a conocer quiénes serán los principales beneficiados de esta legislación. En esta ocasión, Intel, Samsung y TSMC se encuentran entre las empresas favorecidas por la millonaria inversión de Estados Unidos.
Intel, Samsung y TSMC entre los beneficiados por la millonaria inversión de EEUU
Unas semanas atrás, Intel expresó su intención de acceder a más fondos tras el monto inicial recibido. Según la firma norteamericana, esta nueva suma de capital es crucial para mantener su posición de liderazgo en el mercado, amenazada por TSMC, el gigante taiwanés.
De acuerdo con información de PC Gamer, tanto TSMC como Samsung se verán beneficiados por las ventajas otorgadas por la Ley CHIPS. Las subvenciones e incentivos ascienden a más de 20.000 millones de dólares, distribuidos entre las tres compañías.
En concreto, se prevé que Samsung reciba 6.000 millones, TSMC 5.000 millones e Intel, la gran beneficiaria, obtenga 10.000 millones. Estos montos se destinarán a la construcción de fábricas en territorio estadounidense, algunas de las cuales aún están en fase de planificación.
Por ejemplo, Samsung confirmó sus planes de establecer una fábrica en Texas para 2025, con un costo estimado de 25.000 millones. Los 6.000 millones asignados se destinarán a este proyecto. TSMC y Intel también tienen en marcha la construcción de instalaciones en Arizona y Ohio, respectivamente, bajo los beneficios de la Ley CHIPS.
Así, la industria de semiconductores en Estados Unidos comienza a moverse gracias a esta legislación, la cual ha favorecido a las principales empresas tecnológicas del sector.
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