En un giro significativo para el mercado tecnológico, China ha decidido modificar su patrón de consumo de tecnología, lo que ha desencadenado consecuencias negativas para empresas emblemáticas estadounidenses como Apple y Tesla. Esta decisión ha ocasionado un impacto directo en la rentabilidad y la presencia de las compañías en el gigante asiático, provocando pérdidas significativas. La nueva estrategia de consumo adoptada por China ha reconfigurado el panorama comercial internacional, generando un escenario desafiante para las empresas estadounidenses que dependen en gran medida de este mercado. La reacción en cadena de esta transformación en el comportamiento de los consumidores chinos ha evidenciado la vulnerabilidad de las empresas extranjeras frente a las decisiones políticas y comerciales de las potencias mundiales.
China prefiere lo local: Apple y Tesla sufren las consecuencias en ventas
El conflicto tecnológico que libran Estados Unidos y China está empezando a hacer mella en la estabilidad de las compañías norteamericanas en el país asiático. A mediados de octubre del año pasado, China confirmó que daba la espalda a Apple y que volvían a confiar en opciones como Huawei, ya que los ciudadanos chinos prefieren apoyar la economía local antes que la extranjera. Y, unas semanas atrás, conocimos los resultados de dicha decisión: las ventas del iPhone 15 están muy por debajo de lo esperado.
Conflicto EE UU - China afecta a Apple y Tesla en mercado asiático
Elon Musk lo ha logrado. Gracias a los satélites de Starlink, todos los iPhone y Android pueden realizar llamadas desde cualquier lugar. De esta forma, China ha pasado a ser uno de los mercados que peores resultados le ofrece a la compañía norteamericana. Si bien su presencia en el mismo sigue siendo relevante, está a años luz de distancia de lo que era antaño. Aspectos como el conflicto que viven los dos países, la prohibición del uso del iPhone en departamentos gubernamentales o el crecimiento de Huawei han jugado en su contra.
Ambas firmas han visto como su cuota de mercado cae trimestre tras trimestre. Zhan Wenlong, físico nuclear y delegado del Partido Comunista Chino, ahondó en un aspecto diferencial que puede explicar parte de la situación de Apple: “nos animan a utilizar teléfonos nacionales, ya que los de Apple no son seguros”. Tras esto, aseguró que, a pesar de fabricarse en China, no tienen constancia de si los chips tienen “puertas traseras” o no, una acusación que también se ha relacionado con Tesla.
La firma de coches autónomos, conocida por ser la más relevante de su sector, vio cómo sus ventas cayeron un 7,9% en 2023 respecto a lo cosechado en 2022. Como motivos, además de la apuesta de los ciudadanos chinos por las marcas locales, están otras variantes como las zonas prohibidas para la conducción de Tesla. Así, cerca de complejos militares o gubernamentales no se puede circular con un vehículo de la marca de Elon Musk, ya que China teme que este recopile datos confidenciales.
Por ello, y para sorpresa de muchos viendo lo que sucedió años atrás, Tesla y Apple sufren las consecuencias de la apuesta de China por los productos nacionales.
Deja una respuesta