Tres leyendas de Hollywood rechazaron Muerte Súbita, película de Jean-Claude Van Damme que batió récords de fracaso

Tres leyendas de Hollywood rechazaron Muerte Súbita, película de Jean-Claude Van Damme que batió récords de fracaso

En el mundo del cinematógrafo, hay películas que pasan a la historia por su éxito rotundo, pero también hay otras que se quedan en el olvido debido a su fracaso estrepitoso. Uno de los ejemplos más destacados es Muerte Súbita, un filme de acción protagonizado por el conocido actor Jean-Claude Van Damme, que no solo no conquistó a la crítica y al público, sino que también batió récords de fracaso en la taquilla. Pero lo que pocos saben es que antes de que Van Damme aceptara el papel, tres leyendas de Hollywood rechazaron la oferta de protagonizar este filme, que se convirtió en uno de los mayores fracasos de la historia del cine.

La trilogía de rechazos: cómo Muerte Súbita se convirtió en un fracaso sin igual

A principios de los años 90, las películas de acción parecían estar monopolizadas por tres nombres: Sylvester Stallone, Arnold Schwarzenegger y Bruce Willis. Cualquier producción que aspirara a ser un taquillazo solía buscar el protagonismo de alguno de ellos, pero cuando los tres, por diferentes motivos, rechazaron participar en este proyecto, algo debía darles mala espina. Pero no pasa nada, porque para eso iba Jean-Claude Van Damme, como el coche escoba para protagonizar Muerte Súbita, uno de los mayores fracasos de su carrera.

Van Damme sin estrella: cómo el rechazo de los grandes actores llevó a Muerte Súbita al fracaso

Muerte Súbita fue una de esas películas que intentaron emular el éxito de Jungla de Cristal, con la acción concentrada en un solo espacio y un héroe atrapado en una situación explosiva. La trama sigue a Darren McCord (Jean-Claude Van Damme), un exbombero que asiste a un partido de hockey con sus hijos. Pronto, descubre que un grupo de terroristas ha tomado el estadio y que su líder, interpretado por Powers Boothe, tiene un plan para volar todo el lugar si no se cumplen sus demandas. McCord, armado solo con su ingenio, decide enfrentarse a los terroristas y salvar a su familia, así como a todos los asistentes al partido.

Antes de que Van Damme se hiciera con el papel principal, el estudio intentó convencer a algunos de los actores más cotizados del género. Arnold Schwarzenegger fue el primero en ser considerado para interpretar a Darren McCord, pero después de filmar dos grandes proyectos consecutivos, Mentiras arriesgadas (1994) y Junior (1994), decidió que no era el momento de encadenar un tercer rodaje.

Luego fue el turno de Sylvester Stallone, quien, tras leer el guion, decidió rechazar la oferta porque no le convencía la calidad de la historia. Aunque en aquel momento no lo sabía, esta decisión resultó ser bastante acertada. Por su parte, Bruce Willis estaba ya comprometido con otro proyecto, precisamente Jungla de cristal: La venganza (1995), una secuela del éxito que marcó un antes y un después en su carrera y en el género de acción.

La película que no fue: Muerte Súbita, la epopeya de Jean-Claude Van Damme que fracasó en la taquilla

Pese a contar con una premisa emocionante y Van Damme en el punto álgido de su popularidad, Muerte Súbita no consiguió cautivar ni a la crítica ni al público. Una de las principales razones fue su clara falta de originalidad. La cinta fue comparada, y no en términos halagadores, con Jungla de Cristal, que había establecido un estándar difícil de alcanzar en las películas de acción en espacios cerrados. Hasta el cartel quería parecerse al de Jungla de Cristal.

Van Damme, conocido más por su destreza física que por su capacidad actoral, no lograba llenar el vacío que dejaron los gigantes del cine de acción que rechazaron el proyecto. La crítica fue implacable con la película. La falta de profundidad de los personajes y las actuaciones, junto con una trama que no ofrecía nada nuevo, contribuyeron a que Muerte Súbita fuera vista como una copia inferior de otras películas de acción de más éxito. El público tampoco respondió bien, y la película recaudó solo 64 millones de dólares a nivel mundial, una cifra que no estaba a la altura de las expectativas ni del presupuesto invertido.

Si te sientes valiente, aún no has visto la película o te apetece revisitar esos días en los que Van Damme luchaba por sobrevivir en un estadio de hockey y en la cartelera de estrenos, puedes encontrar Muerte Súbita disponible en SkyShowtime.