La innovadora PlayStation que también era un televisor: un experimento curioso de Sony
La PlayStation 2 no solo es la consola más exitosa de todos los tiempos, según reveló la propia Sony unos meses atrás, sino que también protagoniza historias de lo más rocambolescas gracias a su impacto en la cultura popular. De hecho, fue extremadamente popular incluso por su potencia, razón que llevó al gobierno de Japón a prohibir su uso para fines militares.
Sin embargo, la historia que hoy contaremos no está relacionada con ese aspecto, sino con un curioso experimento: el televisor que incorporaba una consola de Sony.
Un televisor ambicioso
Como señala el portal TechSpot en una reciente publicación, esta idea tan disparatada de Sony vio la luz hace 14 años. Por aquel entonces, en pleno 2010, la lógica habría invitado a pensar que la firma nipona apostaría por la PlayStation 3 en lugar de la PS2, pero el aumento que habría supuesto en costes llevó a la compañía a lanzar el KDL22PX300, un televisor Sony Bravia con una PlayStation 2 incorporada.
Y, además de esta, contaba con dos ranuras para tarjetas de memoria, otros dos puertos para mandos, puertos USB adicionales, entrada Ethernet y salida de audio digital óptico. Esta unidad contó con una pantalla de 22 pulgadas con una resolución de 720p y compatibilidad con múltiples entradas como VGA y HDMI.
Se trató de una colaboración entre Sony y la tienda Richer Sounds, razón por la que se trató de un dispositivo exclusivo del Reino Unido. En la actualidad, su valor oscila entre los 700 y 6.000 euros, ya que influyen valores de lo más determinantes como el estado, pero hay que destacar cuál fue su precio original: 300 euros.
Un incentivo para la compra
Así, por poco más de lo que cuesta un televisor normal, tenías uno con una PS2 incorporada. Para muchos, la inclusión de esta consola se convirtió en un incentivo para su compra. Al ser un sistema multiplataforma, tenías la posibilidad de disfrutar del catálogo tanto de PS2 como de PS1, su predecesora.
Además, también era compatible con películas DVD, un aspecto diferencial para los aficionados al séptimo arte. Y ello, sumado a las opciones en la red que tenía el sistema, daba la oportunidad de acceder a canales como Bravia IPTV o YouTube.
Por ello, 14 años después, este sigue siendo uno de los inventos más particulares de Sony.
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