En el vasto y rico universo de J.R.R. Tolkien, Middle-earth ha sido explorado y descubierto por millones de lectores y espectadores en todo el mundo. Sin embargo, hay un secreto olvidado que ha permanecido en las sombras durante demasiado tiempo. Un personaje hobbit, no mencionado en las películas de Peter Jackson, tiene una historia que cambiará para siempre nuestra percepción de la épica aventura de Frodo. Con una valentía y habilidad que rivaliza con la de los más grandes héroes de la Tierra Media, este quinto amigo de Frodo se convirtió en el compañero más valioso en su peligroso viaje hacia la destrucción del Anillo Único. Prepárate para descubrir la historia de un héroe que ha sido pasado por alto durante demasiado tiempo.
El hobbit olvidado que cambió el curso de la historia: Fredegar Bolger, el héroe que defendió La Comarca
Todo el mundo conoce a Frodo, Sam, Merry y Pippin. Y claro, al bueno de Bilbo, y al infame Gollum. Incluso al pobre Déagol, a Gerontius Took, Lobelia Sacovilla-Bolsón y al granjero Maggot. Pero, ¿conoces a Fredegar Bolger? Pues fue un auténtico héroe de La Comarca y llegó a enfrentarse al mismísimo Saruman.
Uno de los pequeños grandes héroes de El Señor de los Anillos y de la mitología de J.R.R. Tolkien para su Tierra Media. Fredegar El Gordo Bolger es uno de esos personajes que, aunque no aparecen en las películas de Peter Jackson, tienen un papel crucial en los libros de J.R.R. Tolkien.
El quinto y valiente Hobbit del que casi nadie se acuerda
Fredegar era un hobbit de La Comarca, específicamente de la Cuaderna del Este. Era un pariente lejano de la familia Bolsón y uno de los amigos más cercanos de Frodo. Fredegar formaba parte del círculo íntimo de Frodo Bolsón, y fue uno de los pocos que conoció desde el principio la existencia del Anillo Único y los peligros que conllevaba.
En la versión literaria de La Comunidad del Anillo, Fredegar es uno de los conspiradores que descubren el plan de Frodo para dejar La Comarca y lo ayudan en los primeros pasos de su misión. Mientras Sam, Merry y Pippin decidieron acompañar a Frodo en su viaje hacia Rivendel, Fredegar, un hobbit amante de la comodidad y la seguridad de su hogar, decidió quedarse atrás.
Sin embargo, su decisión no fue por cobardía, sino por estrategia. Fredegar se quedó en la casa de Frodo, para mantener la apariencia de que Frodo aún estaba en La Comarca y despistar así a los Nazgûl.
Protector de La Comarca
Fredegar Bolger mostró su valor y lealtad a Frodo y a La Comarca de maneras que muchos hobbits no pudieron. Cuando los Nazgûl atacaron La Comarca buscando a Frodo y el Anillo, Fredegar, a pesar de su miedo, logró escapar y dio la alarma en Los Gamos. Este acto de valentía permitió que los hobbits locales se prepararan y defendieran sus tierras, aunque fuera momentáneamente, de los temidos Espectros del Anillo.
Fredegar, conocido hasta entonces como El Gordo debido a su complexión, demostró que su corazón y valor eran mucho más grandes de lo que su nombre sugería. Pero su papel como protector no terminó ahí. Durante la ocupación de La Comarca por Saruman y sus secuaces, Fredegar lideró un grupo de resistencia. Aunque fue finalmente capturado, posteriormente fue liberado tras la Batalla de Delagua por Frodo, Sam, Merry y Pippin, quienes encontraron a un Fredegar mucho más delgado y maltrecho, pero con la misma valentía de siempre.
La ausencia en las películas de Peter Jackson
A pesar de su importante papel en los libros, Fredegar Bolger no aparece en las películas de Peter Jackson. Hay varias razones para esto. Primero, las adaptaciones cinematográficas requieren condensar y simplificar tramas para mantener un ritmo adecuado y una duración manejable. Jackson optó por eliminar la subtrama de Fredegar para centrarse en los personajes principales.
Así, en las películas, la salida de Frodo de La Comarca es mucho más rápida que en los libros, eliminando la necesidad del engaño que Fredegar. Si Frodo, Sam, Merry y Pippin pudieron regresar a La Comarca tras destruir el Anillo Único, fue gracias a que había una Comarca a la que regresar, y eso se lo debemos en gran parte al bueno de Fredegar Bolger.
Su valentía y sacrificio, aunque no se ven en la gran pantalla, son fundamentales en la narrativa de Tolkien. Fredegar Bolger es un recordatorio de que el heroísmo puede encontrarse en los lugares más inesperados y que incluso el hobbit más tranquilo y hogareño puede tener el corazón de un héroe.
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