Todavía no están listos. Valve ha prohibido a los jugadores de Deadlock recopilar datos sobre sus partidas, y hay un buen motivo para ello
En un movimiento sorprendente, Valve, la desarrolladora detrás del popular juego de estrategia en tiempo real Deadlock, ha decidido prohibir a los jugadores recopilar datos sobre sus partidas. Esta medida ha generado un gran revuelo en la comunidad de jugadores, quienes se preguntan qué puede estar detrás de esta decisión. Según fuentes cercanas al desarrollo del juego, la prohibición se debe a que los datos recopilados podrían revelar información confidencial sobre el funcionamiento interno del juego. ¿Qué significa esto para los jugadores y qué implicaciones tendrá en el futuro del título? A continuación, exploraremos los detalles detrás de esta polémica decisión.
Valve prohíbe trackers de Deadlock: ¿por qué el éxito es un problema?
El éxito de Deadlock es un problema
Antes de existir oficialmente, Deadlock ya estaba causando sensación. Sin embargo, lo que ha ocurrido desde que Valve anunció oficialmente el juego es hasta difícil de creer. Un videojuego del que hasta hace poco no sabíamos nada y que está en formato de beta cerrada se ha convertido en uno de los más populares de todo Steam. No cabe duda de que los desarrolladores estarán encantados con la recepción de su híbrido entre MOBA y hero shooter.
El éxito también ha traído consigo un problema cuya única solución es de lo más radical. Valve prohíbe las páginas webs de estadísticas sobre Deadlock, también conocidas como trackers. Estas ofrecen información sobre ciertas estadísticas del videojuego en cuestión, como cuántas veces se selecciona un determinado héroe, que porcentaje de partidas gana, que objetos suele elegir o cuál es el rendimiento de cada uno de ellos.
¿Por qué Valve prohíbe los trackers?
La razón es simple: Deadlock está en beta. En esta fase del juego, la información puede ser un problema. La función oficial de estas páginas es hacer que los usuarios optimicen la toma de decisiones, lo que de por sí es un problema. Para mejorar el diseño de un juego, se necesitan ver cómo los usuarios se equivocan, prueban cosas extrañas y juegan dejándose guiar por su intuición.
En este sentido, lo más probable es que el equipo de desarrollo vuelva a permitir la recopilación de datos cuando se acerque el estreno o se pongan a prueba modalidades competitivas. Las estadísticas de victoria pueden, por ejemplo, hacer que un personaje se elija más; lo que ensucia los datos que Valve quiere recopilar.
Un ejemplo de Riot Games
Los creadores de LoL también han tomado la decisión de prohibir la recopilación de estadísticas sobre algunos modos de juego. Arena es un modo de juego que incentiva a los jugadores a probar cosas nuevas. Pensamos que será más fuerte si, a través de la experimentación, podemos ver caminos en el metajuego que lo hagan progresar, dijo cuando prohibió ciertas funciones de los ‘trackers’ el año pasado para su evento de verano.
Conclusión
Aunque por norma general estos servicios ofrecen muchas más cosas positivas que negativas, hay ciertas situaciones en las que pueden ser contraproducentes. En el caso de Deadlock, Valve ha decidido prohibir los trackers para proteger la integridad del juego en su fase de desarrollo.
El desarrollo de Deadlock sigue adelante sin mayores sobresaltos y el juego sigue ganando usuarios a buen ritmo. Habrá que ver cuanto dura esta fase de prueba tan particular del videojuego de Valve.
Aunque, si queréis ser optimistas, os recuerdo algo. La fase de pruebas de Dota 2 comenzó en 2011 y acabó en 2013… el día que el juego se estrenó oficialmente.
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